Líricamente rústicos - Respeto

Qué lástima me dan ciertos personajes, que habiéndose subido al tren del éxito, se les cae la careta como si ésta fuera de papel y estuviera lloviendo a cántaros.

Entiendo que la vida de un jugador de fútbol es corta y es dura, a veces durísima, sobre todo para el pibe que la pelea de abajo. Hay que aguantar muchas cosas hasta poder "llegar", me acuerdo en este momento la canción que escuchaba prácticamente como canción de cuna "jugar en la quinta, después en primera..." Para muchos pibes es eso, la canción es el fiel reflejo de su vida. Pibes que vienen del barrio, de no tener un mango y de soñar con pisar una cancha. A algunos se les da, a otros Dios los toca con la varita mágica y los transforma en barriletes cósmicos, dándoles un lugar en el cielo para que jueguen en su campito y muchos, pero muchos otros, se quedan en el camino.

Quiero hablar de esos que llegaron, no todavía al cielo, pero tuvieron la oportunidad de tocarlo con la mano el día que pisaron una cancha de 11 con la camiseta puesta en un partido oficial.

Pueden esas personas no sentir que representan a miles de almas que corren con él, que atajan con él, que dirigen con él. La vida del hincha tampoco es fácil. Muchos llevan copas, otros llevan cruces, pero a todos los lleva la misma pasión, el mismo sentimiento, la locura incondicional de ser hincha, casi irracional diría. Puede, o tiene, ese hincha, que "soportar" que el jugador no lo represente? que el técnico no lo represente? que la misma dirigencia no lo represente?

Qué difícil... Hay jugadores que llegan a un punto en donde ya no sé si se dan cuenta de lo que llevan en el pecho y en su espalda, se olvidan de cuando eran pibes como el pibe que le decía a la madre: "Vas a ver que lindo, cuando allá en la cancha, mis goles aplaudan; seré un triunfador..." Bah en realidad creo que la estrofa en ese momento se les sube a la cabeza... Pero se les sube tanto que no lo deja ver, no lo deja pensar... Y es una lástima! Porque además de estar haciendo lo que siempre soñó, además de estar "trabajando" en lo que más le gusta, (incluso algunos tienen la posibilidad de hacerlo en el club de sus amores) desperdician esa oportunidad mágica o la echan a perder con declaraciones que realmente dan vergüenza ajena. Esa gente para mi ya no tiene valor alguno, a pesar de los miles de dólares que se lleva de mi Club. Y digo mi Club no de boca suelta, no solamente porque lo sienta mío, sino porque soy socia, me pertenece. Y hoy, pido respeto.

Jim (con los tapones de punta)

Ojalá, y por el Club, tenga que arrepentirme de lo que dije y pedir perdón, pero ante todo LOS COLORES.